Historia de los sneakers

Origen de las zapatillas deportivas

Las deportivas tienen su origen en 1870, cuando se crearon las zapatillas llamadas Plimsoll. La característica principal de estas deportivas es que tenían una línea de color a lo largo de toda la suela. Esta línea de color se asemejaba a la línea de flotación de los barcos (Plimsoll), de aquí su nombre. 

Las zapatillas Plimsoll eran utilizadas por la gente que se iba de vacaciones, pero pronto empezaron a utilizarlas también deportistas cómo los jugadores de tennis o croquet. De la misma manera, las zapatillas de deporte empezaron a usarse para  el ocio y para hacer actividades al aire libre.

A comienzos del Siglo XX comenzaron a emplearse en América las primeras zapatillas con suela de goma que recibían el nombre de sneakers. Las primeras zapatillas de goma fueron diseñadas por spalding en el año 1907. El mercado de las sneakers creció mucho cuando los jugadores de baloncesto empezaron a patrocinar las zapatillas y los jóvenes hacían cola para conseguir un par de deportivas.

Durante los años 50 los códigos de vestimenta se relajaron y los niños empezaron a estilar las zapatillas en el día a día, sustituyendo al zapato de cuero convencional, de tal manera que la venta de este último se vio muy afectada.

Pero fue durante los años 90 cuando las compañías de sneakers empezaron a hacer mucho hincapié en el marketing como forma de vender su producto. Las deportivas se volvieron un producto de moda, más allá de su uso atlético.

Al día de hoy las zapatillas deportivas son consideradas como un artículo de moda, el cual tenemos muy en cuenta a la hora de complementar nuestros outfits. De hecho, son de vital importancia a la hora de combinarlos con looks más sofisticados para darles un aire más relajado.